Una vez más, estaré ahí

en espera.. en decencia.

Necesitar, desear y en silencio permanecer

callaré sin satisfacción, nuevamente sin explotar.

Es esencial, se sabe, es sustancia;

lo he sepultado por honestidad, por entrega…

No faltará mucho para que lo acumulado presione a salir.

Los días pasan y la niebla no se disipa

el tiempo se acorta, de continuar así,

decidiré por un cambio, esa busqueda «de» (…)

que me permita ofrecer lo guardado con recelo,

es preciso entregarlo para que sea apreciado.

«es la falta lo que me hace dudar»

Mansedumbre existe, estoy en tus manos;

honestidad es la clave, somos fieras también.

Valóralo y aprendé de los demás

sabes a quien me refiero…

ahora lo tienes, si lo sueltas, tal vez nunca más.

Esta vez, sólo una lo juro,

soportaré ser sombra y fantasma, silencio y secreto,

el tonto arrinconado por caprichos ajenos.

Es lindo fantasear, es necesario… no obstante la piel se añora…

ésa es imprescindible.

(en la serie automatísmos diarios)