Una a una van cayendo,
se escucha su andar;
calma, aire y paz,
minuto a minuto
el gris se acumula
suma y decrece
ascienden, esperan, caen
y luego fallecen.
Ruido constante que conmueve
humedad carcomente
pulso solitario, concepto íntegro,
mente divagando.
En negro y cristal
mantengo tu mirada
nítida imagen del tiempo;
y a la vez que bajar las siento
compruebo su muerte
y, así como perecen,
mi vida va pereciendo.
(en la serie automatismos diarios)
Automatismos Diarios 
Cuánta intensidad hay en tus palabras, amigo! Abrazos!
Muchas gracias por acompañarme a diario
besos
pero las lagrimas no es un rio interminable aunque doloroso,un abrazo,…si, jamas como lo haria uno
Gracias por tus palabras
🙂 gracias por las tuyas,hasta luego
🙂 gracias por las tuyas,hasta luego