Mis manos desean humedecerse,
intentan sumergirse, deben tocarla
y, al acercarse, su imagen desaparece…
se disipa como la niebla, así volátil:
difusa representación de amor.
Ella fluye y en sosiego avanza,
soberbia, cayente que en fuerza clama;
cristalina y emotiva, ¿honesta?:
ahora no lo sé, por desgracia.
Los vientos tiran y se dirigen al mar
se suman y se funden con la tierra;
entre sus brazos se estrechan y
permanecen en unidad;
virtud indivisible, ventisca gélida,
fracción independiente…
perfumada con el aroma de flores,
abrazo de fortaleza y esperanza;
agua de ángeles y paz.
(en la serie automatismos diarios)
!Uf! Hoy estas bien apasionado. Besillos.
Algo así, besos de regreso
Me gusta leerte así. Besillos.