Si contara la lucha interna que me acontece

podría llenar los pozos más profundos del universo;

si mostrara mis sentimiento abiertamente

el mundo cambiaría su rumbo hacia un esplendor.

Es infinito y oculto, completo e intransferible,

tiene pertenencia directa, es estable.

Si comprendiera, inecesariamente,

como habría empezado todo sin tu presencia;

nada hubiese cambiado al momento;

lo he dejado fluír y al hacerlo

he percibido nítidamente su incremento,

constancia diurna, vida taciturna y deseo.

Si te culpara ahora mismo por engendrarlo, por motivarlo,

serías la eterna responsable de mis gracias y felicidades,

esa persona quien me ha sometido y obligado a la plenitud,

aquella que me ha hecho llorar profundamente de alegría.

Ahora mismo, si dijera todo lo nunca he dicho, lo oculto,

podríamos escribir, eternamente, libros llenos de automatísmos.

(en la serie automatismos diarios)