He vuelto y, a pesar de los cambios manifiestos,
no me arrepiento de hacer nuevamente presencia;
estilar y tomar resoluciones contundentes, de forma libre,
implica esperar, enloquecer y ser, sobre todo, constante.
Claramente he comprendido la falla y acepto parte de mi culpa;
ante la entrega total se esperan retribuciones, cierta equivalencia;
no se puede vivir constantemente en “comercios” de sentimientos
estoy convencido, todavía no es tarde para rescatar lo obtenido.
Rasgos peculiares guardados celosamente en mi memoria
expresión viva y oportuna, acciones nobles, tiernas,
dignas de alabanza y merecedoras de caricias;
¿qué hubiese pasado en mi vida sin este retorno?
Desde ahora, pacientemente, deseo provocar un comienzo,
brindando el alma y el cuerpo sin pagas ni recompensas;
ofrenda y entrega total en libertad de acción, estilo abierto;
flujo de vida y gozo de instantes, disfrutar el momento.
Me sumergiré en tus brazos sin preguntar ni solicitarlos,
los sentiré en mi piel sin siquiera pedir sean apretados,
me ahogaré en tus labios y los besaré hasta el cansancio,
simplemente me entregaré sin esperar nada a cambio.
(en la serie automatismos diarios)
No me lo puedo creer!!!!!!!!!!!! Enhorabuena. Disfruta tu momento. Me encanta.