Es lo que tengo y soy lo que doy,
sigo al frente, en lucha y sin remordimientos
constancia y ruptura, realismo en sigilo
estupor momentáneo cual cascada fatigosa;
la existencia implica constancia, no exigencias…
lo comprendo tarde, nunca pudiste estar.
Tengo que aprender a vivir de nuevo,
en la ausencia de tu presencia, en mis solitarismos
enfrentar mis miedos e internalizar realidades;
concientizar que la única verdad
es aquella que se ha vuelto presente.
Preciso contemplar tu partida, dejarte ir
hacerte libre, ahuyentar complejidades
te ofrezco cada mañana cálida y cada noche tibia
úsalas, no las necesitaré más, en libertad te dejo.
Volar de vuelta a mi nido y contemplar mi atardecer
mi vida marchita, fétida y fatídica.
Dejar volar recuerdos y ejercitar mi ser;
ésto ha sido a través de tantos años y
ésto será por el resto de mi contados días.
La entrega fué cayendo en la pérdida de valor,
tiempo perdido en desganas, egoísmos e inseguridades
compromisos al viento, palabras sin sustento
lucha incansable para que al final, quede nada… sólo aire.
Yo lo valoro, en huesos me quedo…
empezar de nuevo y estar en paz.
(en la serie automatismos diarios)
Según se mire puede parace un relato de comienzo de una vida nueva o simplemente la perdida dolorosa de por quien se ha luchado tanto.
Este punto es para mi dificil de diferenciar. Es cierto que en ocasiones nos liamos en señamiento por atrapara a a alguien que no nos corresponde pero también es ciertoque hay etapas en los que uno está más flojo y debe ser el otro el que tiré, guie y oriente.
No sé cual es tu caso, de todas formas sigue escribiendo, libera el alma.