Practicamente he muerto:
sí, en voz y palabra
en fluidez y zozobra
¿quién dijo que las letras eran fáciles?
¿que eran sutiles? ¿desbordantes?
¿quién?.
El mar y el viento amenazan…
Hoy, todo ha sido escrito,
incluso aquello que yace en mi mente.
Tal vez,
sí, en condicional…
esta vez deba buscar
otras páginas, diferentes vidas.
Quizá,
me ves pero no me tienes…
me percibo sin pertenencia
Olvido: ¿quién eres? ¿qué fuiste?
He muerto practicamente;
y entre el bosque, los cedros y mi alma
la gracia ha fallecido…
(en la serie automatismos “diarios”)