Te observé en calma
olivos tiernos
te busqué en noches
rojos carnosos
te llamé en mañanas
tez esperada
te deseé en sabanas
grito elocuente
te esperé en mis brazos
tersura de manos
te incité con mis besos
suspiros lejanos
te lloré con mi alma
palabras esperadas
pero
te extraño siempre
almas unificadas
te amo en pasiones
vivo de nuevo
¡me amas! en noches y días
feliz me quedo