Imágenes autómaticas que te invitan a venir
observar a mi lado lo que he vivido y
y por tantos años me ha hecho feliz
las tenía guardadas en el alma y se salieron
supuse esperar hasta el momento indicado
y éste llegó, de improvisto, antes de lo esperado
una imágen casi diaria al igual que mis palabras,
que, automáticamente se expresan, que fluyen
que suspiran por tus labios y tus tiernas caricias.
Letras deseadas que mantienen la espera
que me liberan de ansiedades y miedos
desechan desprecios y renacen sentimientos
entregadas, ambas, a diario en cada momento.
Y con éstas frecuentes entregas
hoy vengo a repetir y confirmar lo acordado
en tu vida me veo ¡inclúyeme ahora!, sugiero; pues
tú te encuentras cada día, en mí, más adentro;
confía en el destino y mantengamos el pacto
seamos un solo ente caminando lado al lado
mirando al horizonte y un futuro, juntos, creando…