Te he extrañado estos últimos días,
pero sobre todo ayer, que moría por tus brazos.
Mi necesidad de tu presencia se incrementa con el tiempo
tu ausencia me obliga a desearte.
Espero hoy sea diferente, estar de nuevo juntos
a la par mirando al horizonte;
sumergido en tus caricias y añorando reencuentros,
deseando uniones…luchando por eso.
Te he extrañado en mis sueños
en mis noches en vela, en mis pesares;
en cada despertar…en aroma.
Eres parte ya de mí, estás en mi piel y en mi sentir.
No te alejes nuevamente, permanece a mi lado…
quiero sentirme amado.
Pero sobre todo, te he extrañado en sonrisa y voz
en nota y mirada; en carcajada y vida.
Son los instantes, esos pequeños momentos
que se guardan y dan sentido a mi existir.
Son las memorias las que me mantienen vivo
y me motivan a seguir adelante.
(en la serie automatísmos diarios)