Cerré mis ojos y apareciste,
como todas las noches,
ahí en mi mente dando vueltas
y al mirarte en esa obscuridad
supe que no te podré
nunca dejar de amar.
Le haces falta a mi casa
a mi cuerpo
pero sobre todo
a mi alma
y mientras voy durmiendo
te vas haciendo más presente
por que sé que estás ahí
cautiva.
Voy durmiendo y
el viento gélido que abraza mis manos
junto con mis deseos de tocar tu piel
se concentran ahora en tu ausencia
me haces falta -te lo digo
me miras en mis sueños y sonríes
no te vayas
-suplico-
te amo como no lo hice antes
le haces falta a mi cama
pero sobre todo
a mi alma
y finalmente duermo
-
Únete a otros 992 suscriptores